La Fira de Tots Sants de Cocentaina recibirá entre el 1 y el 3 de noviembre 400.000 visitantes y generará un volumen de negocio superior a los 20 millones de euros. Esas son las previsiones que maneja el Ayuntamiento para un certamen en el que no ha hecho mella la crisis, hasta el punto que volverá a contar con 900 expositores, después de que 150 se hayan tenido que quedar fuera por falta de espacio. El alcalde lamenta que la falta de apoyo de la Diputación y la Generalitat haya impedido llevar adelante iniciativas como el Fitur de pequeño formato o el «Palau Mediterrani».

La Fira de Tots Sants arranca este próximo viernes su 667 edición, y lo hace con unas excelentes perspectivas tanto en los que respecta a participación como a cifras de negocio. Así lo avanzaron ayer el alcalde, Rafael Briet, y el concejal de Fira, Vicent Sandoval, quienes destacaron que se volverá a contar con 900 expositores sobre una superficie de 110.000 metros cuadrados. Maquinaria agrícola, automóviles, artesanía, alimentación, turismo, productos típicos y los ya clásicos mercado medieval y zoco árabe configuran la completa y atractiva oferta.
Pese a que el espacio se ha incrementado este año, la organización se ha visto obligada a rechazar las solicitudes de participación de 150 expositores. «Hay mucha demanda –indicaba Sandoval–, pero el espacio es el que es y respetamos la veteranía de la gente que ya lleva tiempo asistiendo al certamen».

El Ayuntamiento, asimismo, habilitará 127.000 metros cuadrados de aparcamientos, y como ya se hizo el año pasado, habrá un servicio de autobús para el parking situado en los accesos a Cocentaina desde Valencia.

En lo que respecta a las previsiones económicas, el alcalde indicó que el volumen de negocio rondará los 20 millones de euros. «Hay que hacer una media entre la gente que se compra desde un artículo de artesanía o algo para comer a la que adquiere un coche o un remolque», dijo.
Destacar, en este mismo apartado, que el valor de los productos expuestos en el certamen ascenderá a 40 millones de euros.

Rafael Briet lamentó el escaso apoyo que recibe la Fira. Según sus palabras, «si la Diputación y la Generalitat apoyasen más podríamos llevar a cabo otras actividades y potenciar la oferta». En este sentido, se refirió a cuestiones como «la propuesta del pequeño Fitur, en el que los municipios interesados podrían mostrar sus tradiciones y fiestas exhibiéndolas en directo para los visitantes del certamen». También al proyecto «Palau Mediterrani», que pretendía, a través de la Casa del Mediterráneo, mostrar cada año en el Palau Comtal un país diferente. «Sin embargo –dijo–, y vista la situación en la que se encuentra esta institución y la falta de apoyo, de cara al año que viene hablaremos con las embajadas de diferentes países en España para ver si podemos hacer algo parecido».

Respecto a la subvenciones recibidas para esta edición, señaló que «apenas llegan a los 3.000 euros, que es lo que se le concede a cualquier pueblo por lanzar un castillo de fuegos artificiales. Un evento tan importante como la Fira merece más respaldo».

M.Vilaplana www.diarioinformacion.com