El paro aumentó en las comarcas de l'Alcoià, El Comtat y la Foia de Castalla en 1.502 trabajadores durante 2012, alcanzando a 31 de diciembre la cifra global de 18.441, según refleja un informe difundido ayer por el secretario comarcal de UGT, Vicente Prieto. El incremento registrado implica más del doble del que se produjo en 2011, que había sido de 709.
Si estas comarcas habían acabado 2011 con 16.939 desempleados, la cifra se ha disparado hasta los 18.441 un año más tarde. Vicente Prieto, además, subraya que es el mayor incremento de los últimos tiempos, ya que en 2011 había sido de 709 y en 2010, de 334. Las cifras más contundentes fueron las de 2009, con un aumento de 3.387, y 2008, con 4.679. El líder de UGT recuerda que a 1 de enero de 2008 la cifra de parados en l'Alcoià, El Comtat y la Foia de Castalla era de 7.830.
La ciudad más castigada en el último año ha sido Alcoy, con 814 desempleados más, seguida de Ibi con 312, Castalla con 79, Onil con 64, Muro con 51, Cocentaina con 25 y Banyeres con 19, como cifras más destacadas. En el extremo opuesto está Tollos, que registra tres parados menos y Millena, Fageca y Almudaina, dos en cada caso.
Vicente Prieto también destaca que en el ejercicio ya cerrado se han realizado en estas comarcas 24.037 contratos de trabajo, lo que implicó un cierto crecimiento con respecto al precedente, concretamente 1.403 más. Del total, 2.162 fueron indefinidos, lo que supone el 9%, un 0,5% menos, "por lo que podemos deducir que está avanzando la precariedad del mercado de trabajo. El 42% de los contratos son de mujeres y el 58% de hombres".
Por sectores, los servicios siguen aumentando su preponderancia, hasta el punto que ya suponen el 69% del total, mientras que la industria se queda en el 22,8%. "El año pasado la contratación bajó en industria y construcción y subió en agricultura y en servicios", manifestó el secretario comarcal de UGT.
En base a todos estos datos, Prieto considera que "la precariedad laboral ha aumentado en nuestra comarca ya que a las altas tasas de temporalidad de nuestro país se une el miedo de los trabajadores al despido por la reforma laboral. Esta precaridad se da mayoritariamente entre las mujeres y los jóvenes, aunque está aumentando en los trabajadores en general".
Por último, el dirigente sindical revindica la necesidad de "reactivar la economía, teniendo en cuenta el necesario cambio del modelo productivo".

M.Candela  www.diarioinformación.com